TOUR POR LA GRECIA CLÁSICA
Iniciamos el viaje en la ciudad histórica de Atenas, capital de Grecia, que tanto aportó en la Edad Antigua a la cultura de Occidente.
En primer lugar, visita panorámica de la ciudad: la Casa del Parlamento (cambio de guardia), La Plaza Sintagma, La Antigua Universidad de Atenas, la Academia y la Biblioteca Nacional (edificios, desde el punto de vista arquitectónico, de estilo neoclásico).
Seguidamente, la esperada visita a la ACRÓPOLIS ("ciudad alta"), con guía local. Se ubica sobre una gran roca caliza a una altura de 156 metros. En la entrada al recinto sagrado, lugar de culto, encontramos los Propileos ("antes de la puerta"), con columnas dóricas en la primera hilada y columnas jónicas detrás, más elegantes y con las típicas volutas del capitel. En el exterior, flanqueando la entrada principal de 5 puertas varias columnas dóricas; mientras que en el interior, espacio central, se hallan las columnas jónicas que soportan el techo de mármol.
A la derecha de los Propileos, en la esquina del recinto amurallado, se sitúa el Templo de Atenea Nike (dedicado a las diosas Atenea y Nike /"Victoria"). Se trata de un pequeño templo, cuyo estilo de la edificación es de orden jónico.
Avanzamos hacia el interior del recinto y nos situamos frente a la fachada Oeste del icónico Templo del Partenón (en restauración). La palabra griega Partenón significa "casa de la virgen". Estaba dedicado al culto de la diosa Atenea, patrona de la ciudad de Atenas, que en la disputa con el dios Poseidón, fue elegida por los ciudadanos como protectora y patrona. Según la mitología, en la disputa, Poseidón como regalo hizo brotar una fuente de agua salada, y Atenea plantó un olivo. Los ciudadanos votaron por Atenea como deidad protectora y patrona de la ciudad.
El proyecto de la construcción de un templo dedicada a la diosa Atenea se concibió tras la victoria de los griegos sobre los persas en la batalla de Maratón, que tuvo lugar en el año 490 a.C. Sin embargo, el templo que ha llegado hasta nuestros días, data de época de Pericles, fue construido entre los años 447-432 a.C. El Partenón representa un modelo arquitectónico de perfección, armonía y equilibrio; es decir, un canon de belleza de la arquitectura clásica, donde se proyecta "la proporción áurea" ideada por Fidias, basada en el número áureo "fi", cuyo símbolo matemático en honor a Fidias es una letra griega formada por una circunferencia atravesada verticalmente por su diámetro. El diseño genera una ilusión óptica al contemplar esta obra maestra de la arquitectura.
La edificación presenta un estilo de orden dórico, con ocho columnas en las fachadas Este y Oeste, y rodeado de columnas su perímetro. Está construido con mármol blanco. El friso estaba adornado con esculturas que representaban la procesión de la Panatenea. En los frontones, decorados con esculturas que representaban el nacimiento de Atenea en uno de ellos, y en el otro, la disputa de Atenea y Poseidón por la posesión de Atenas. En su interior, se situaba el santuario con la estatua crisoelefantina (oro y marfil) de la diosa Atenea Partenos, del célebre escultor Fidias (quien dirigió las obras de la Acrópolis).
En la parte Norte del recinto, se halla el templo del Erecteion ("Templo de Erecteo", rey mítico de Atenas), de estilo jónico, con el famoso Pórtico de la Cariátides (jóvenes doncellas) que soportan, a modo de columnas, el entablamento. Las esculturas son una réplica, puesto que las originales se encentran en el Museo de la Acrópolis. Está dedicado a los dioses Atenea Polias y Poseidón. Data de finales del siglo V a. C., entre los años 421-406 a.C. y está construido con mármoles del pentélico. Encontramos un olivo en honor a Atenea y una fuente en honor a Poseidón (también la huella, o marca, del tridente en el suelo).
Desde uno de los miradores contemplamos el emblemático Teatro de Dionisio (Dioniso), construido en en la ladera Sur de la Acrópolis, y es considerado como el primer teatro del mundo, siglo V a. C.
También en las inmediaciones, en la ladera suroeste de la Acrópolis, se encuentra el Odeón de Herodes Ático, construido en el siglo II d. C., donde en la actualidad se celebran eventos culturales.
Paseamos por algunas de sus calles principales y más concurridas (hay calles muy complicadas, suciedad y ambiente que genera inseguridad), para visitar por la tarde noche edificios neoclásicos iluminados, como la Academia de Atenas, la Biblioteca Nacional de Grecia y la antigua Universidad; más adelante, la Catedral Católica de San Dionisio, el Museo Numismático y, finalizamos, en la gran Plaza Sintagma, donde se halla el majestuoso Palacio del Parlamento Griego, con el monumento al soldado desconocido y el vistoso cambio de guardia (coreografía).
Resulta también interesante la visita a la Catedral Ortodoxa de la Anunciación de Santa María (siglo XIX, estilos grecobizantino y neoclásico), si bien la vista exterior de la fachada es un tanto sobria, posee una decoración interior maravillosa, con frescos de pintura de gran belleza que cubren paredes, techos y cúpulas, así como magníficos iconos.
Las calles del Barrio Plaka, junto con la céntrica Plaza Monastiraki, suelen ser las más concurridas, donde se mezclan lugareños con turistas, con numerosas tiendas y establecimientos de hostelería. En la Monastiraki se halla la icónica iglesia ortodoxa de la Virgen Mary Pantanassa, su construcción data del siglo X como un antiguo Monasterio, denominado "El Gran Monasterio"; y en su interior alberga bellísimos frescos e iconos. Al lado, también encontramos la Mezquita Tzistarakis (no está abierta al culto), interesante construcción otomana.
Pasear entre la multitud de turistas que se dan cita por la calle Areos escuchando a músicos y cantantes callejeros viene a ser de obligada presencia. Recorrido por los alrededores de los restos arqueológicos de la Biblioteca de Adriano, el Ágora Romana, La Torre de los Vientos, La Puerta de Medrese, Biblioteca de Panteno, Estoa de Átalo, Restos arqueológicos romanos, Museos (Antigúedades, Cultura Griega, Historia de la Universidad de Atenas). Las vistas del imponente Hefestión (siglo V a.C,), un antiguo templo griego de estilo dórico con estructura de mármol y frisos en bajorrelieves. Se trata de uno de los templos mejor conservados de la antigua Grecia, situado en el noroeste del ágora de Atenas.
A los pies de la ladera de la colina de la Acrópolis se encuentra un restaurante con platos típicos de la gastronomía griega (ensaladas con riquísimas aceitunas, la moussaka, los postres...), su nombre Xenious Zeus, con ambiente agradable y buen servicio. Asimismo, hay un bar en la misma escalinata de subida con mesitas en la terraza y excelentes vistas del Hefesteion ( Hefestión) y de la muralla de la Acrópolis.
Al atardecer, para contemplar la puesta de sol proyectada sobre la Acrópolis, así como la iluminación en el anochecer, subimos al mirador donde se levanta el monumento conmemorativo a Filopapo (mausoleo construido con mármol del pentélico en el siglo II d.C. en honor a Filopapo, arconte en Atenas y cónsul en Roma, durante la etapa de dominio romano) que ofrece una de las vistas panorámicas más espectaculares de la Acrópolis. La ascensión no resulta complicada, ni requiere demasiado esfuerzo, pues es más bien corta. Además, existe otro excelente mirador intermedio. Las fotos tomadas desde lo alto son espectaculares y la experiencia inigualable.
Una de las noches nos acercamos al lujoso hotel Gran Bretaña, en su azotea se encuentra una espléndida terraza con una vista nocturna de la Acrópolis iluminada espectacular, que se puede acompañar con la degustación de uno de sus maravillosos cócteles, su precio un tanto elevado se compensa con el disfrute, merece la pena.
La visita al Museo Arqueológico Nacional de Atenas se hace imprescindible. El museo alberga obras artísticas de los distintos periodos históricos de la Antigua Grecia: prehistórico, arcaico, clásico, helenístico, romano...
Algunas de las más valiosas y famosas obras, especialmente esculturas, se recogen en fotos que fueron tomadas en las distintas salas del museo. En primer lugar, los tesoros de la necrópolis de Micenas (civilización micénica 1600-1050 a.C.), entre los que se halla la denominada máscara del rey Agamenón (comandante en jefe de la flota griega en la guerra de Troya); si bien, tras los estudios realizados, no se corresponde con la realidad, dado que no representa al rey Agamenón. El nombre fue dado por el arqueólogo alemán Schlieman, quien realizó las excavaciones y halló los tesoros de la antigua Polis de Micenas.
Del célebre escultor Policleto la estatua del "Diadumenos" en Delos (450-425 a.C.)
La estatua de Poseidón en bronce, del período clásico (500-450 a.C.).
La estatua en bronce del "Jinete montado en caballo" encontrada en el cabo Artemision (Eubea)..
La estatua de Afrodita esculpida en mármol (versión que data del siglo II a. C. imitando el modelo de la Afrodita de Siracusa del siglo IV a.C.).
De la civilización minoica (en la isla de Creta) encontramos en la primera planta unos frescos de gran interés, destaca el llamativo colorido de la escena.
Realizamos, una de las tardes, la visita guiada a Cabo Sounion, ubicado en el extremo meridional de la región de Ática, donde se alza sobre el mar, en lo alto del promontorio, el Templo de Poseidón. Estas ruinas arqueológicas datan del siglo V a.C., durante el gobierno de Pericles. El edificio tenía forma rectangular, con columnata perimetral en sus cuatro lados, y cuya entrada principal se orientaba al Este, como la mayoría de los templos griegos. Se conservan bastante bien las nueve columnas de estilo dórico de la cara Sur, que se levantan sobre un podio, o base elevada. Lugar idóneo para ver una de las puestas de sol más hermosas de toda Grecia.
Partimos en autobús a realizar un tour viajero por varios de los lugares más emblemáticos de la Grecia Clásica. Iniciamos el recorrido dirigiéndonos hacia el Valle y Montañas de Meteora, concretamente a la ciudad de Kalambaka, donde se sitúa el alojamiento. En el trayecto realizamos una parada en el Oráculo del rey espartano Leónidas, quien con sus 300 soldados espartanos (y algunos griegos más, procedentes de otras "Polis", se enfrentaron al poderoso y numeroso ejército Persa en el estrecho Paso de las Termópilas "Puertas Calientes", oponiendo una resistencia heroica, y que murieron en su empeño de frenar, o al menos ralentizar, el avance de los Persas hacia la ciudad de Atenas (batalla que tuvo lugar en el año 480 a.C.). Este acto heroico de sacrificio sirvió para que las ciudades griegas se armaran y, unidas, derrotaran a los Persas en las batallas de Salamina y Platea. Este acontecimiento ha sido tratado en numerosas obras literarias y cinematográficas, como la famosa película de los "300". Por la tarde, tras el almuerzo en un restaurante con unas vista impresionante del paraje montañoso de roca oscura "Meteora", que etimológicamente significa "roca en el aire" - "suspendido en el aire". Dicho nombre se corresponde con la singularidad de las monumentales formaciones rocosas, pilares rocosos con forma de dedo pulgar, tolmos coronados por las edificaciones de monasterios (cenobios) asentados en lo alto. Los monasterios de Meteora son Patrimonio de la UNESCO, y forman parte de un paisaje natural de "ensueño", uno de los lugares más impresionantes que se pueden contemplar, un regalo para los ojos, las impactantes imágenes quedarán grabadas en nuestras retinas y en el recuerdo. En el pasado, existieron un total de 24 monasterios; y en la actualidad se hallan habitados 6 monasterios.
En primer lugar, realizamos la visita al Monasterio de Varlaam, fundado en en el siglo XIV por el asceta Horsius Varlam (la construcción actual data del siglo XVI), ubicado en lo alto de un torreón vertical de roca, al que se accede, en nuestros días, por un pequeño puente y escalera con numerosos escalones. Según el visionado de vídeos, en el pasado la ascensión se realizaba arropados en una red y elevados con una cuerda gruesa instalada en una polea que se operaba desde la torre. También se practicaba la escalada, como otra forma de acceso a los monasterios, mediante escalones (peldaños) labrados en la roca desnuda (oquedades talladas). Los monjes que los habitaban buscaban el aislamiento y la mayor cercanía al cielo, un entorno propicio para la oración y la reflexión (de "vida retirada"). Las vistas desde lo más alto son espectaculares, divisamos en los alrededores el Monasterio del Gran Meteoro (siglo XIV), suspendido sobre un saliente rocoso, el que se eleva a mayor altitud, con una altura de 613 metros sobre el nivel del mar. También avistamos el Monasterio de Roussanou, sobre un pilar rocoso aislado, que despunta entre la exuberante vegetación arbolada. de tonos verdes. Tomamos varias fotografías del lugar, las vistas son impresionantes, tiempo dedicado al goce y recreo de la contemplación de un paisaje "único", que supera todos los calificativos positivos. Alberga un museo con numerosas reliquias y tesoros ( iconos, manuscritos, vestimenta, crucifijos, báculos, coronas, tiaras...) y una iglesia Ortodoxa Bizantina con preciosos frescos de pintura.
Subimos al autobús y nos dirigimos a visitar el Monasterio de Monjas de San Estéfano, pero en el trayecto realizamos una parada en el mirador con impresionantes vistas del Monasterio Santísima Trinidad, que se alza en la cima de un vertiginoso acantilado. Sirvió de escenario para una de las secuencias más impactantes de la película de James Bond 007 titulada "Sólo para tus ojos". El mirador nos ofrece una perspectiva primorosa para la captura de bellas fotos.
Reanudamos la marcha hasta el estacionamiento situado frente a la entrada del Monasterio de San Estéfano, regentado por monjas de culto Ortodoxo. Destaca la exuberante decoración de la capilla. También posee un cuidado y hermoso jardín floral. Desde el patio se obtiene una buena vista panorámica de la localidad de Kalambaka y su entorno. Regreso al hotel de la ciudad, ducha, cena y paseo nocturno por la ciudad.
Al día siguiente, a primeras horas, subí a la azotea del hotel donde se encuentra la terraza para avistar desde lo alto la cadena montañosa de roca oscura. Tomé varias fotografías de las formaciones rocosas, alguna de ellas coronada en la cima por un monasterio.
En la salida hacia Delfos, cuando el autobús se alejaba de la ciudad, se divisaba al fondo una bella estampa de las montañas de Meteora y a sus pies la ciudad de Kalambaka.
En el trayecto hacia Delfos, realizamos una parada delante del monumento erigido en homenaje a los caídos del "Batallón Sagrado de Tebas" (considerado hasta entonces como invencible) en la batalla de Queronea, ocurrida en el año 338 a.C. , y donde el ejército comandado por Filipo II de Macedonia venció al ejército de coalición de las Polis griegas. El monumento es una escultura denominada "El León de Queronea", erigido en el lugar de la batalla.
Atravesamos una zona montañosa de exuberante vegetación arbolada, principalmente pinos, y realizamos otra parada para el almuerzo. El restaurante elegido lleva por nombre "Agelos House", buena comida, excelente servicio y con unas vistas maravillosas de la montaña.
Continuamos la ruta hasta los alrededores de las zonas arqueológicas de Delfos, pasada la localidad de Arachova, donde se hallaba nuestro alojamiento. Por la tarde, visitamos las ruinas del legendario Santuario de Delfos, donde en el pasado se situaba el famoso Oráculo de Delfos, al que acudían personajes poderosos e ilustres de la antigüedad greco-romana a consultar las predicciones de la Pitonisa "Pythia". En primer lugar, visita guiada al Museo, donde destacan, entre otras, la escultura denominada "El Auriga de Delfos" (474 a.C., en bronce), la obra "El Agias" (355 a.C.) del célebre escultor griego Lisipo de Sición, "Los Kouros de Kleobis y Bitón", "La Esfinge de Naxos", "El Ónfalo"...
Seguidamente, realizamos a pie un recorrido por el recinto arqueológico de Delfos. Nos detuvimos a admirar, mientras la guía nos facilitaba información, ante el templete del Tesoro de los Atenienses, construido en mármol entre los años 510-480 a.C, de orden dórico, que albergaba las ofrendas votivas de la Polis de Atenas al dios Apolo..
Más adelante, el pedestal donde se ubicaba el Ónfalo (ombligo del mundo, el centro de la tierra conocida, entre Oriente y Occidente. Según la mitología, donde se juntaron las águilas liberadas en extremos opuestos por el dios Zeus). Al fondo, la Montaña del "Monte Parnaso", morada del dios Apolo y las Musas, diosas de las artes, la literatura y la música.
A continuación los restos arqueológicos del Templo de Apolo. Según la mitología, el dios Apolo mató a la Serpiente Pitón que encarnaba a "la madre Tierra", dejándola pudrirse bajo el sol. En la cripta del templo, bajando hacia el interior subterráneo, se hallaba el Oráculo de la Pitonisa (Pythia), quien tras entrar en "trance" (por los gases vaporosos que emergían de las profundidades, y bajo los efectos, tras masticar hojas de laurel) adivinaba el futuro y comunicaba sus predicciones a sus sacerdotes, estos a su vez se lo trasladaba a los que iban a consultar el oráculo; pero las predicciones se caracterizaban por su ambigüedad, y la interpretación resultaba un tanto difusa. En el Templo de Apolo se hallaban esculpidas frases filosóficas, entre las que destaca: "Conócete a ti mismo", "Nada en exceso" "Respeta la ley"... En este sentido, el dios Apolo representaba el equilibrio, la armonía, la razón; mientras que el dios Dionisio, dios del vino y el teatro, representa lo opuesto, es decir, la liberación de instintos, la pasión desenfrenada, el exceso incontrolado, la locura ritual embriagadora. El Santuario estaba dedicado a dos deidades y su culto dividido en dos periodos anuales, durante 6 meses, coincidiendo con el verano, se daba culto al dios Apolo (y se celebraban los juegos Píticos consagrados a Apolo. A los triunfadores se les premiaba con una corona de laurel, el árbol sagrado del dios Apolo. Según el mito de Apolo y Dafne, el dios perseguía a la ninfa Dafne, ésta cuando iba a ser alcanzada pidió ayuda a su padre, el dios río Ladón, quien la convirtió en Laurel. Apolo llorando se abrazó al Laurel y le adoptó como su árbol sagrado; y sus hojas siempre verdes coronarán las cabezas de las gentes como símbolo de victoria); por otro lado, durante los otros 6 meses, coincidiendo con el invierno se daba culto al dios Dionisio en su santuario, con celebraciones y fiestas en el Teatro (Actuación en el Teatro demostrativa de la buena acústica).
Delante del Templo de Apolo se halla un réplica de "La Columna de la Serpiente", también conocido el monumento como el Trípode de Platea, conmemorativo de la victoria griega sobre los persas en la batalla de Platea, que tuvo lugar en el año 479 a.C. La Columna original, en bronce, fue llevada a Constantinopla por Constantino El Grande, y en donde se encuentra actualmente. También delante de la entrada, se encuentra un laurel, árbol sagrado de Apolo, cuyas hojas eran masticadas por la Pitonisa, que sentada en un trípode entraba en "trance" y transmitía un mensaje ininteligible a un sacerdote, que se encargaba de elaborar y trasladar la respuesta, un tanto ambigua, al consultante, que en definitiva era quien debía interpretarla (en ocasiones sí se cumplían los vaticinios, pero en otras no; siempre los errores achacables a una mala interpretación).
Las ruinas del Templo de Apolo: rampa de acceso a la pronaos, con restos de 5 columnas de orden dórico que se levantan sobre un podio, el espacio de la Naos, debajo se ubicaba el oráculo, espacio del Opistodomos, y alrededor la Perístasis.
Continuamos el recorrido rodeando los restos arqueológicos del templo, sillares/bloques de piedra correspondientes a suelos, a la estructura de cimientos y partes bajas de los muros, pilares, columnas y graderíos...
Nos adentramos en el Teatro, situado en la ladera del Monte Parnaso, con su Cavea o graderío adaptado a la orografía del terreno, el círculo empedrado de la Orchestra y las ruinas de los muros de la Escena (Skene). Toma de fotos y fugaz audición.
Subimos remontando la ladera y alcanzamos, en lo más alto, el Estadio donde se celebraban las competiciones atléticas de Los Juegos Píticos, con la pista térrea y las gradas de piedra. Fue construido en el siglo IV a. C. y modificado en el siglo II a.C. Toma de fotos del estado actual.
Dentro del Santuario de Delfos se hallaba la ofrenda votiva "La Esfinge de Naxos" (escultura del siglo VI a.C.), de dicha isla, símbolo de protección, sobre una una columna de orden jónico, con capitel de volutas. Se trata de una criatura monstruosa de la mitología, con cabeza y pecho de mujer, y con cuerpo de leona alada. Su nombre significa estranguladora, pues planteaba un enigma de difícil resolución y quien no lo acertara era devorado (el enigma más conocido: "¿Qué criatura camina en cuatro patas por la mañana, en dos al mediodía y en tres al atardecer?". Edipo dio con la respuesta correcta, al responder que dicha criatura era el hombre, y así liberó a la ciudad de Tebas del monstruo).
La Fuente Castalia era el manantial sagrado del santuario, en la que se lavaban la Pitia (Pythia), los sacerdotes y se purificaban todos aquellos que iban a consultar al oráculo. Tomó el nombre de la ninfa Castalia, que, ante las pretensiones eróticas de Apolo, prefirió lanzarse al manantial y ahogarse.
En la lejanía, se divisan los restos arqueológicos del Gimnasio, en primer lugar, y al fondo, los del Templo o Tholos (circular) de Atenea Pronaia (siglo IV a.C.), donde permanecen en pie tres de sus columnas que sostienen parte del entablamento (restos del arquitrabe, friso y cornisa)...