domingo, 15 de enero de 2023


EN EL CORAZÓN DE LA ALCARRIA: BRIHUEGA Y CÍVICA

En el libro de viajes de Camilo José Cela (premio nobel de literatura) "Viaje a La Alcarria" se menciona en el recorrido la villa guadalajareña de Brihuega, situada en el corazón de la Comarca y en un altozano de la vega del río Tajuña. El vocablo Brihuega, según sus raíces celtíberas, hace referencia a lugar fuerte y protegido, En el pasado, contaba con dos recintos amurallados, uno externo de gran perímetro alrededor de la población, y otro interior alrededor del castillo de la Peña Roja, lo que en el pasado fuera la alcazaba árabe. 



A destacar la roca caliza sobra la que se asienta y el manantial de agua subterránea, que alimenta a las 17 fuentes, y entre las que sobresale la fuente de los Doce Caños, con los emblemáticos lavaderos adjuntos, el llamado lavadero de La Blanquina. 

Según cuenta la leyenda, al respecto, moza que, en la fuente de los doce caños,, de izquierda a derecha beba, en el año novio se echa. En el medievo, enclave defensivo estratégico y zona de caza para la aristocracia; asimismo, fértil vega fuente de alimento y riqueza para sus pobladores, con varias iglesias y monasterios en la villa auspiciados por el arzobispado (privilegio jurisdiccional otorgado por el rey). 


Del siglo XIII se mantienen y destacan tres importantes iglesias protogóticas (transición del románico al gótico): iglesia de San Felipe, iglesia de San Miguel y la Iglesia Parroquial de San María de la Peña  -a sus pies una Ermita en la oquedad de la roca caliza). 






Por otro lado, los edificios del Convento de San José (museo de la historia), de la orden de los Franciscanos Alcantarinos (San Pedro de Alcántara) y anejo a la muralla, junto al Arco de San José, y fachada del Convento de las Jerónimas de San Ildefonso. En las inmediaciones, el Monasterio Cisterciense de Santa Ana (cerrado).

Cuenta además con destacados monumentos históricos, como la Plaza del Coso (Edificios del Ayuntamiento y Palacio donde se la oficina de Información y Turismo, así como las Cuevas Árabes), diversos paños y puertas-arcos de la muralla:

- PUERTA DE LA CADENA


-ARCO DE COZAGÓN

-ARCO DE SAN JOSÉ

-ARCO DE LA GUÍA 



De especial interés histórico y monumental sobresale el Castillo de la Peña Bermeja (recibe su nombre por el rojo bermellón de la roca caliza, de origen musulmán). 


En su interior alberga un cementerio con aires de tipo romántico, una sala interior y una capilla mudéjar. 




En la azotea, planta superior, subiendo por una escalera de caracol, se encuentra un mirador con unas espectaculares vistas de la villa y del valle. 


En el extremo de la urbe se ubica la Real Fábrica de Paños, ilustre arquitectura civil del siglo XVIII, que cuenta con bellos jardines en el recinto.


Asistimos, por casualidad, a la celebración de la festividad de San Antón, con la bendición de los animales, y procesión del Santo con el séquito de jinetes a lomos de sus caballos.


En los últimos años, la localidad de Brihuega es conocida también como "El Jardín de La Alcarria" por sus campos de lavanda o espliego, que en su época de floración estival tiñen el paisaje de un color violeta azulado de gran belleza. Declarada zona de gran afluencia turística


Dentro del término municipal de la villa, se halla la pintoresca aldea de CÍVICA, la denominada "Petra de Hispania", excavada en la roca caliza, abandonados sus habitáculos incrustados en las oquedades y grutas, que nos trasladan a escenarios exóticos y de películas irreales, mágicas, historias de cuento y fantasía. En la actualidad, un enclave de propiedad privada, que tratan de alguna manera de acondicionar de cara al turismo, por su singularidad y encanto. 




Las cascadas de agua y surgencias en la roca cubiertas de musgo y vegetación se suma a los atractivos del paraje, que bien merece la pena visitar, pues dista no muy lejos por carretera secundaria de Brihuega.



Como resumen, comentar que la villa de Brihuega cuentan con un rico y atractivo patrimonio histórico-monumental y natural de gran interés.


A la vuelta, viajando hacia Guadalajara, conviene hacer una parada en la localidad de Torija, donde se alza un espectacular castillo con sus imponentes torreones, y deleitarse con la contemplación de dicha fortaleza.